Poco se menciona y menos se conoce la vida del Sargento Primera Andrés Castro Estrada. En Managua, su ciudad natal, no se ha bautizado ni una sola calle con su nombre. La política de turno erige monumentos a los «héroes» que han matado a nicaragüenses defendiendo regímenes oscuros; no existen monumentos a los héroes verdaderos que han defendido la soberanía patria nicaragüense de invasores extranjeros. Ese monumento a Andrés Castro, a la entrada de la hacienda San Jacinto (foto), no lo erigió ningún gobierno, sino los estudiantes y maestros del Instituto Nacional Central Ramírez Goyena en 1956, conmemorando el centenario de la Batalla de San Jacinto y la estatua es obra de escultora Edith Gron.
Andrés Castro Estrada nació en 1831 en la ciudad de Managua, don Regino Castro fue su padre y doña Javiera Estrada, su madre. Castro fue reclutado a los 23 años en el ejército Legitimista del Gral. Fruto Chamorro Pérez para atacar a los insurectos Democráticos que se rebelaron contra el régimen de Chamorro Pérez quien murió tras ser derrotado en Occidente. Al comenzar la guerra contra los filibusterios de William Walker, el joven Castro se presenta ante el Gral. Tomás Martínez Guerrero y se integra de lleno a la guerra, distinguiéndose el 21 de Octubre de 1855 en el combate contra los norteamerianos en Tipitapa y como consecuencia fue ascendido a Sargento Primero.
Pero fue en la Batalla de San Jacinto donde Andrés Castro encontró su ingreso a la inmortalidad. En el Parte de Guerra de San Jacinto, el Gral. José Dolores Estrada relata la acción heróica del Sargento Castro...
«el muy valiente sargento primero Andrés Castro, quien por faltarle fuego a su carabina, botó a pedradas a un (norte) americano que de atrevido se saltó la trinchera para recibir su muerte».
En San Jacinto la lucha fue total y a muerte. La superioridad en hombres y armas de los filibusteros no permitía dar tregua. Cuando Andrés Castro se enfrentó a un filibustero armado con un -entonces-- moderno revólver. Arma desconocida en Centroamérica y con ella apuntó al pecho desnudo del Sargento Castro, que no tuvo tiempo de recargar su viejo fusil de chispero ni tenía al yankee al alcance de su cutacha. Impelido por la defensa de su vida amenazada por el revólver del yankee, veloz como un relámpago, recogió una piedra del corral y la disparó con fuerza y precisión, impactando la frente del invasor que cayó sangrante, pero aún tienía el revólver en la mano y por ello lo remató con la cutacha.
El Sargento Primero Andrés Castro Estrada tenía 25 años cuando luchó contra los invasores norteamericanos en San Jacinto donde resultó herido en una pierna, pero no recibió ningún ascenso.
Tres meses después de San Jacinto, en Diciembre de 1856, se casó con Gertrudis Pérez, también de Managua.
Casado y con dos hijos, Andrés Castro adquirió una finquita al Sur Oeste de Managua, en un rincón de donde después fue la hacienda El Retiro, propiamente cerca de donde estuvo el Hospital El Retiro.
Como el heróico Sargento Andrés Castro no era granadino ni pertenecía a las oligarquías de la época, sino un obrero de Managua, su genealogía se disipó con el tiempo, pero su gesta la recogió con veneración su pueblo.
Andrés Castro fue atacado por la espalda por un anónimo enemigo cuando transitaba hacia Las Sierras de Managua. Murió en 1876 cuando apenas tenía 45 años de edad. Sus restos están enterrados en el Panteón San Pedro de Managua.
Ningún gobierno ha publicado ninguna biografía ni bautizado calles ni le ha levantado un monumento en su Managua natal.
Pero fue en la Batalla de San Jacinto donde Andrés Castro encontró su ingreso a la inmortalidad. En el Parte de Guerra de San Jacinto, el Gral. José Dolores Estrada relata la acción heróica del Sargento Castro...
«el muy valiente sargento primero Andrés Castro, quien por faltarle fuego a su carabina, botó a pedradas a un (norte) americano que de atrevido se saltó la trinchera para recibir su muerte».
En San Jacinto la lucha fue total y a muerte. La superioridad en hombres y armas de los filibusteros no permitía dar tregua. Cuando Andrés Castro se enfrentó a un filibustero armado con un -entonces-- moderno revólver. Arma desconocida en Centroamérica y con ella apuntó al pecho desnudo del Sargento Castro, que no tuvo tiempo de recargar su viejo fusil de chispero ni tenía al yankee al alcance de su cutacha. Impelido por la defensa de su vida amenazada por el revólver del yankee, veloz como un relámpago, recogió una piedra del corral y la disparó con fuerza y precisión, impactando la frente del invasor que cayó sangrante, pero aún tienía el revólver en la mano y por ello lo remató con la cutacha.
El Sargento Primero Andrés Castro Estrada tenía 25 años cuando luchó contra los invasores norteamericanos en San Jacinto donde resultó herido en una pierna, pero no recibió ningún ascenso.
Tres meses después de San Jacinto, en Diciembre de 1856, se casó con Gertrudis Pérez, también de Managua.
Casado y con dos hijos, Andrés Castro adquirió una finquita al Sur Oeste de Managua, en un rincón de donde después fue la hacienda El Retiro, propiamente cerca de donde estuvo el Hospital El Retiro.
Como el heróico Sargento Andrés Castro no era granadino ni pertenecía a las oligarquías de la época, sino un obrero de Managua, su genealogía se disipó con el tiempo, pero su gesta la recogió con veneración su pueblo.
Andrés Castro fue atacado por la espalda por un anónimo enemigo cuando transitaba hacia Las Sierras de Managua. Murió en 1876 cuando apenas tenía 45 años de edad. Sus restos están enterrados en el Panteón San Pedro de Managua.
Ningún gobierno ha publicado ninguna biografía ni bautizado calles ni le ha levantado un monumento en su Managua natal.
En Managua existen
ResponderEliminar- Barrio Andrés Castro
- Colegio o Instituto "Andrés Castro" un centro de estudios privado fundado originalmente en el barrio Riguero y actualmente funciona en el residencial Ciuda Jardín atendiendo estudiantes en primaria y secundaria completas.
- La Escuela Nacional de Sargentos del Ejército de Nciaragua lleva el nombre de Andrés Castro
- El Banco Central de Nicaragua (BCN) ha emitido billetes con la efigie del monumento a Andrés Castro
- Correos de Nicaragua ha emitido Sellos Postales conmemorativos evocando la figura de Andrés Castro
Rey
ESTO SE HA DADO HASTA QUE SE RECONOCIÓ LA BITÁCORA HISTÓRICA DE ESTE HIDALGO HOMBRE.
EliminarLOS MONUMENTOS QUEDAN PEQUEÑO,POR LA INMENSIDAD DE SU PROEZA.
SALUDES.